martes, 29 de abril de 2014

TRABAJADORES CONTRA LA PARED TOTALITARIA

El fallecido encantador de serpientes asomó en sus primeros años de gobierno ciertas luces de redención social para la clase trabajadores y demás sectores excluidos socialmente, pero éstas se fueron apagando con la imposición de planes anti proletarios y del paradigma el “Estado soy yo” o, “yo hago lo me da la gana” desde las alturas del poder absoluto y la opinión de los demás “nada me importa”, excepto lo que determine el régimen cubano. Y el actual heredero “dictadorzuelo” de Miraflores, tampoco se ha preocupado por hacer algo trascendente en materia laboral -muy por el contrario- lo que ha hecho es despojar a los trabajadores, sin compasión alguna, de un conjunto de derechos constitucionales, contractuales y de beneficios establecidos en convenios internacionales de obligatorio cumplimiento.

De esta manera, el derecho a organizarse los trabajadores y desarrollar planes en el campo del ejercicio rutinario sindical, está siendo obstruido descaradamente por los distintos entes gubernamentales, mediante procedimientos policiales y paralegales. Son decenas los dirigentes sindicales sometidos a juicios amañados o son encarcelados. O peor: asesinados. Las organizaciones de trabajadores afectas a este desgobierno son las únicas que gozan de protección oficial y se les permite cumplir con roles especiales de control, “sapeo”, amenazas y realizar tareas político-ideológicas o de adoctrinamiento” comunistoide”. Un testimonio irrefutable de la conflictividad desgobierno-trabajadores: el encarcelamiento del Secretario General del Sindicato de Ferrominera (Guayana), Rubén González, por defender los intereses de los trabajadores y, la imposición de un régimen de presentación ante tribunales por meses. La férrea lucha con movilizaciones permanentes de los mismos trabajadores, logró finalmente de que se le librara de esa “camisa de fuerza” puntual del despotismo “castro-madurista”. Pero en general, la criminalización de la protesta en el seno de la gran masa de los trabajadores venezolanos, forma parte indisoluble de una política del actual Estado totalitario procubano.

Por otra parte, durante estos 15 años de desgobierno “Castro-Chavo-Madurista”, las políticas económicas han destrozado el salario, el empleo, beneficios laborales y calidad de vida de los trabajadores. El índice inflacionario es uno de los más altos del mundo. El salario mínimo está en el último lugar entre los países de América Latina, es decir en 66 dólares. Y el de Haití está por el orden de los 89 dólares, siendo uno de los países más pobres del planeta. ¡Somos una vergüenza ante el mundo en esta materia, dado a nuestra inmensa riqueza petrolera! Las expropiaciones y quiebra sostenida de empresas privadas han generado una gran masa de desempleados. Amén de la bancarrota en que se encuentran casi todas las empresas públicas (las Empresas Básicas de Guayana, por ejemplo). El empleo productivo prácticamente desapareció de Venezuela y el sector de la economía informal ha venido creciendo de una manera desmesurada. Estamos convertidos en un país de buhoneros, para la sobrevivencia de los que menos recursos tienen.

El modelo totalitario procubano selló su estruendoso fracaso en esta Patria de Bolívar. ¡La lucha por un país con un modelo democrático, soberano, próspero y de bienestar es nuestro camino! ¡Democracia o dictadura es nuestro dilema histórico! ¡Viva el primero de mayo! ¡Viva la clase obrera!



domingo, 27 de abril de 2014

LOS “PICAPIEDRAS” DE LA HABANA Y MIRAFLORES

Sólo basta recorrer, ver las imágenes fotográficas o revisar testimonios de ciudadanos comunes en cualquier ciudad, pueblo o caserío de Cuba y Venezuela, con el ojo crítico de indagar un poco más sobre la realidad de las cosas, para uno darse cuenta que algo muy grave y dramático ha ocurrido con el modelo emblemático del cacareado “Socialismo del Siglo XXI” o del “Mar de la Felicidad”. Parecen hoy dos caricaturas de países arrasados por tsunamis, terremotos o sometidos al infierno de guerras terriblemente cruentas. La ruina, miseria, pobreza y desesperanza observada y analizada muestra que, del pregonado “salto revolucionario” hacia adelante, muy por el contrario, estas dos naciones controversiales de América Latina, marchan aceleradamente hacia la “era de los picapiedras”, al contrastarlas con un sinnúmero de países del mundo capitalista o de los que en el presente transitan (hace ya muchos años) desde el paradigma del “Socialismo Real” al “Capitalismo de Estado” (Rusia, China, Vietnam…). ¡No han querido aprender la lección de la caída del muro de Berlín y posteriormente del otrora bloque soviético!

Los regímenes de Cuba y Venezuela, se ampararon en el viejo y fracasado concepto del “totalitarismo de Estado” y se ataron al mesianismo de caudillos (Fidel y Chávez), para imponer sus decisiones trascendentes sobre el rumbo de sus desgobiernos en materia económica, política, institucional, militar, social y lo mediático, cultural e ideológico. Amén de acogerse a “banderas” de permanentes conflictos socio-ideopolíticos y geopolíticos a través del manejo hábil de un trasnochado “nacionalismo” y “antiimperialismo” a ultranza, para tapar sus sinvergüencerías de privilegiar a élites para la corrupción y, amasar capitales para amigos y familiares de forma ilícita con las tetas de los “petrodólares”, en desmedro de las mayorías nacionales. La represión bestial criminal contra disidentes, luchadores sociales y población civil que protesta, es el muro de contención que utilizan para tratar de aplacar el desbordamiento frecuente de la ira popular ante sus desmanes inaceptables.

La escasez de los productos básicos, la hiperinflación y el desempleo creciente son las aristas trágicas en el rostro del “totalitarismo Venecubano”, los cuales junto a las colas interminables de la sobrevivencia y las tarjetas de racionamiento reflejan con creces el infierno luciferino del acercamiento vertiginoso hacia el salto atrás de la era de “Trucutú”. Verbigracia la pobreza a cuesta de millones y millones de ciudadanos sometidos a los apagones constantes del servicio eléctrico, escasez de los servicios de agua y cloacas; o viviendo entre el caos del transporte público, refugios miserables por falta de vivienda o entre la basura, porque el servicio de aseo urbano casi nunca funciona. Con la añadidura de la hampa asesina desbordada, dónde casi nadie sabe distinguir entre la que lleva uniforme o la que se encuentra sin éste.

Requerimos ver la luz del túnel hacia un modelo de Estado y sociedad democráticos, que nos coloque en un escenario de excelencia en el campo de la justicia, Estado de derecho, progreso y bienestar integral; en parangón con los demás países civilizados del mundo. ¡Fidel, Raúl, Maduro y Diosdado siguen en la era de los “picapiedras”… ese camino jamás será nuestra destino! ¡Despertemos todos!

jueves, 24 de abril de 2014

“PAQUETAZO” IDEOLÓGICO PARA FORMAR ESCLAVOS

El régimen cubano y sus mandaderos de Venezuela no han desperdiciado oportunidad para tratar de imponer por todos los medios el “Proyecto Venecuba”, “Plan de la Patria” o el “Paquetazo”, como suelen llamarlo en los predios populares. Pero, más allá de lo que se piensa, es bastante ambicioso, porque abarca el ámbito económico, lo social, lo político, lo militar, lo institucional, lo geopolítico, lo territorial, lo mediático, cultural e ideológico. Nos ocuparemos con este escrito de este componente último, dado a los avances de la élite de poder de la Habana y Miraflores, por tratar de implantar como sea la ideología totalitaria, con medidas concretas en el campo de la formación educativa de nuestros niños y adolescentes. No obstante, es bueno ratificarlo, el “megaproyecto” en sí, tiene un claro perfil holístico, sistémico o de conjunto.

Con este “Paquetazo ideológico” en el campo educativo se estarían “socializando” a nuestras generaciones del presente y del futuro, como los “hombres nuevos” del pensamiento único, adoradores (culto a la personalidad) de Fidel y Chávez. De supuestos próceres libertarios de ese trasnochado “totalitarismo nacionalista”, “antiimperialista” y “militarista”. En sustitución de la verdad histórica, en manos de los genuinos héroes de la Patria “libre”, “independiente” y “soberana”; representados por Bolívar, Sucre o Miranda. O porque la realidad trágica enrostra, que hoy Venezuela es más dependiente que nunca de una fuerza extranjera como la cubana, cuya intromisión interna raya en la desvergüenza ante los nacionales y el mundo entero.

De lograr sus deleznables propósitos de dominación y esclavitud sobre los ciudadanos, el “aparato ideológico del Estado totalitario” (con las instituciones a su servicio, el poder cultural y poder mediático) configurarían a su favor todo el andamiaje de “valores”, “creencias” y “representaciones” del paradigma cubano, aun con su secuela de fracasos a cuesta. “Institucionalizarían” la realidad a su manera, sus concepciones, estilos de vida, pensamiento único e intereses de grupos. Las escuelas, liceos, universidades, sindicatos, gremios, partidos políticos, asociaciones y medios de comunicación pasarían a formar parte de ese arsenal de adoctrinamiento ideológico. Esta nueva forma de dominación haría trizas el pensamiento plural, los valores y principios de libertad y democráticos. Esta modalidad de neo-esclavitud nos conduciría al atraso, al rezago científico-cultural, a la miseria, a mayor pobreza, a la ruina y a la desesperanza.

Los promotores de esta “ideología perversa” seguirían (como ahora lo hacen) falsificando la realidad y ocultando la verdad de las cosas. Bajo el manto de la oscuridad quedarían los crímenes, torturas y atropellos contra los estudiantes y ciudadanos disidentes o, contra todos los que protestan en las calles de Venezuela. Y se ocultaría con mentiras y manipulaciones la escasez, los altos precios, la inseguridad, el desempleo, la corrupción, el derroche “saudita” y la entrega del país al régimen criminal cubano. ¡No a la ideologización procubana de la educación y de toda la sociedad venezolana! ¡Nadie se rinde!







lunes, 21 de abril de 2014

¿LA HAMBRUNA, AMENAZA REAL EN VENEZUELA?

La supuesta “revolución” del “Castro-Chavo-Madurismo” que vociferó y vocifera con histerismo enfermizo la lucha por la “igualdad social, agoniza hoy en Venezuela con una situación dramática, radicalmente distinta al contenido de los discursos mentirosos, manipuladores y populacheros: por la grave escasez de alimentos y otros rubros básicos, índice inflacionario sideral (uno de los más altos del mundo), el desplome angustiante de la moneda nacional con respecto al dólar y una amenaza real de hambruna colectiva, que disparará más aún la brecha de la “desigualdad social” entre las mayorías empobrecidas y las minorías privilegiadas de la boliburguesía y los altos funcionarios enchufados del régimen totalitario procubano. El cuento de hadas del “Socialismo del Siglo XXI”, no quedará ni para asustar a los niños. Y los experimentos sociales criminales de estos mediocres intérpretes de la teoría marxista, generarán sin duda, un tsunami de ira hasta en el seno de los propios precursores históricos del “socialismo” en sus diferentes matices, quienes se encuentran bajo castigo en las abominables pailas del infierno.

Ni siquiera la represión bestial que utiliza el desgobierno rojo en Venezuela, para tapar el fracaso estruendoso del paradigma totalitario procubano, servirá de hoja de parra, ante la oleada de hambruna que se avecina. Y cuya amenaza, además, mantiene enloquecidos a los protagonistas de la élite de poder, mediante la aplicación de una serie de medidas económicas desesperadas estatistas y extremadamente extemporáneas. Amén del juego diabólico con las divisas para regateárselos al sector privado productivo, quebrarlos con expropiaciones, no pagarles cuantiosas deudas o generar desconfianza para las inversiones. Así mismo, con esas sucesivas devaluaciones monstruosas, “ajustes” precios regulados, amenaza alza de la gasolina y nuevos impuestos; se pretende evitar la hemorragia de la muerte de este insostenible paradigma totalitario. El otrora “paquetazo” endilgado a la disidencia democrática, es ahora el Caballo de Troya de Maduro y su combo de incondicionales. ¡Sorpresas que da la vida!

Los Castro muy hábiles para sobrevivir en el poder, pese a que nos les importa que la población se muera de hambre, ya se acogieron al salvavidas de las transnacionales y de que éstas podrán invertir en casi todas las áreas de la economía de la isla. Se adelantaron a la inevitable debacle socio-económica en Venezuela, que por razones obvias disminuirán las donaciones, subsidios y negocios chimbos con el régimen del fracasado modelo del “socialismo real”. Pero, dejan con los “crespos hechos” a Maduro y sus acólitos, que se retuercen con la estocada en el corazón del desastre visible en el conjunto del Estado y de la sociedad.

Por eso, la Resistencia Cívica, con esa sostenida presión de calle, los obligará a dar vuelta atrás a sus planes inconfesables de asirse al poder de la teta del Estado y de los petrodólares, en desmedro de los excluidos sociales de siempre, cuya amenaza de hambre ya empieza a tocar a sus puertas. ¡Luchar, luchar… y vencer!


domingo, 20 de abril de 2014

¡RESUCITÓ LA CONCIENCIA COLECTIVA DEL VENEZOLANO!

Hasta el mismo hijo de Dios fue crucificado por los hombres hechos demonios contra todo vestigio del bien, pero luego para asombro de la humanidad entera, resucitó entre los muertos para hacer valer la supremacía del bien sobre el mal. Y esa es en esencia la misma lucha de “resistencia cívica” que mantienen los venezolanos contra los luciferinos de la Habana y Miraflores, que tratan de mantener una tiranía estatal esclavizante con las fuerzas de las armas y, crear ese infierno de pobreza, hambre, miseria, ruina, corrupción, represión y muerte en que se encuentra la Patria de Bolívar hoy.

Los apóstoles como primera vanguardia de los ideales de Jesucristo y los miles de millones y millones de personas que se sumaron a la causa cristiana históricamente son el mejor testimonio de que la fe y el amor mueven montañas, pese a los sufrimientos de las torturas y de la muerte a que fue sometido el hijo del Dios supremo del universo y sus seguidores, por los representantes del mal en la tierra. Así mismo, en cada rincón de Venezuela son muchas las personas castigadas vilmente por régimen del “infierno rojo” por osar enarbolar las banderas principistas de la libertad, justicia, igualdad de derechos y de conquistar un futuro distinto y mejor para todos.

Contrario a lo que dicen algunos, sostengo la tesis de que en el país, desde hace algún tiempo, emergieron muchísimas protestas sociales ante la ineptitud del régimen por dar respuestas y soluciones a las demandas colectivas diarias. Y que éstas, sin duda, contribuyeron a generar ese malestar del colectivo nacional que se mantiene incólume hoy día, con el acicate de un clima de resistencia pacífica en el país entero. El desfase es la falta de sincronización entre las protestas de las barriadas populares ante sus problemas sociales concretos de todos los días (apagones, inseguridad, pésimos servicios, demanda de viviendas, escasez…) y la oleada de descontento volcánico de inmensos sectores de la clase media contra el caos y despotismo del régimen en las principales ciudades del país.
Con la aplicación de distintas formas de lucha y organización la “resistencia cívica” ha enfrentado los desmanes represivos de los esbirros armados de uniforme y sin uniforme que reciben las instrucciones criminales desde Cuba y el Palacio de Miraflores.

La violación a los derechos humanos ha sido tan descarada y en un ámbito de impunidad absoluta que muchísimas voces del mundo han expresado su indignación, repudio y hasta han acudido a la Corte de la Haya, con el aporte indiscutible de una frondosa documentación, fotos, videos y testimonios, que hacen casi imposible que escapen a los justicia internacional los promotores y ejecutores de estos actos genocidas y de un claro perfil criminal nazi-fascista.

El modelo totalitario procubano históricamente ha sido derrotado en varias ocasiones. Venezuela no será la excepción. La conciencia colectiva nacional resucitó y ésta será el inicio de un nuevo amanecer sin despotismo, en plena libertad y en democracia para el bienestar y progreso de todos. ¡Nadie se rinde!

domingo, 13 de abril de 2014

¡PERVERSIDADES HUMANAS DEL TOTALITARISMO!

A uno le cuesta creer que haya tanta maldad en el alma de algunos seres humanos, pero ésta existe y la historia, vivencias o experiencias colectivas así lo confirman. Un sinnúmero de obras de la literatura mundial basan su trama en esa enfermedad terrible de muchos hombres de comulgar con las perversidades humanas; terriblemente monstruosas más allá de lo imaginable. La “Ilíada” escrita por Homero, por ejemplo, narra el fragor de las batallas y hazañas de Aqueos y Argivos por desavenencias familiares, en las cuales hasta los dioses del Olimpo se hacen partícipes de acciones malévolas con engaños y otros entuertos para favorecer los intereses subalternos entre los hombres.

“Los Miserables” de Víctor Hugo con su carga de conflictos dramáticos en medio de la miseria humana. “Fausto” de Johann Goethe con su Mefistófeles convertido en hombre para poder ser, nada menos, que el propio diablo. “Las Lanzas Coloradas” de Arturo Uslar Pietri o “La guerra del fin del Mundo” de Mario Vargas Llosa, que narran la lucha por el poder, por la independencia y por la libertad, con esa mezcla literaria entre realidades dramáticas “antihumanas” y la ficción… ¡son tantas las obras universales con esos contenidos!

En Venezuela, aunque uno esté propenso a convertirse en blanco de enconadas críticas de “tirios y troyanos”, se puede decir que hoy la élite de poder dominante, ya está en capacidad -por la realidad de los hechos y la historia viva- de superar con creces las tramas señaladas de la literatura universal. Por su propia carga de conflictos psicosociales inverosímiles, lucha de poderes y perversidades humanas luciferinas indescriptibles. Sin exageración alguna, cualquier intelectual de prestigio universal o local, tendría en sus manos el más “exquisito” y frondoso material documental, para pasar a la historia con una serie de best sellers de contenidos insuperables. Que lamentablemente han dejado sobre esta tierra de próceres la sangre vertida de futuro por el asesinato de tantos jóvenes por las “fuerzas del orden” de la tiranía y paramilitares tarifados. O por el dolor de los sufrimientos (a que éstos son sometidos) por las torturas que le infringen en las “cárceles de la muerte”, por instrucciones precisas de los amos del poder de estos regímenes criminales de Cuba y Venezuela.

Lo de ellos es conservar el poder dictatorial a toda costa y la riqueza petrolera que subyacen en el subsuelo de la Patria, sin importarles irrespetar el Estado de derecho y los Derechos Humanos consagrados universalmente en todas las legislaciones y convenios conocidos. Y sobre todo, lo más ruin, eso de tratar de arrebatarles a estos jóvenes sus sueños hermosos de lucha por la libertad, la justicia y la igualdad. De que puedan gozar de garantías para alcanzar objetivos de superación, progreso y futuro promisor en democracia. ¡La oferta del paradigma del Totalitarismo de Estado procubano represor y negador de libertades ciudadanas, representa todo lo contrario a estos sueños y utopías humanas de lo posible!

Estamos obligados todos los nacionales, a distanciarnos y combatir las perversidades humanas del totalitarismo envilecedor y nadar contracorriente a éste, con el contenido de contraste con la hermosa poesía al amor de Neruda: “Aunque no sea como está dispuesto/el amor llenará grandes barricas/como la antigua miel de los pastores/”

miércoles, 9 de abril de 2014

¿DIÁLOGO O ANTIDIÁLOGO CON LA TIRANÍA?

Nadie de la disidencia democrática, movimiento estudiantil y “sociedad civil” se niega al diálogo propuesto por terceros (gobiernos y parlamentos de Europa, EEUU y América Latina) para intentar que brille la luz en el túnel, en este tiempo tan aciago en la historia de la República de Venezuela. Pero la discusión y discrepancias está en las exigencias previas, agenda y sí éste es para salir de la dictadura o para oxigenarla, entre otros aspectos. Y mucho más allá: este desgobierno habla de diálogo, pero en la oscuridad de la noche juega el ajedrez de “ganar, ganar”. Pero sobre todo, muy por debajo de cuerda, no cesa en su intento de blindar, a “sangre y fuego”, su fracasado “Proyecto Venecubano”, “Plan de la Patria” y “paquetazo” socio-económico “hambreador”; atornillarse en el poder por tiempo indefinido y proyectar la ilusión de librar una denodada lucha “nacionalista”, “patriótica” y “antiimperialista”.

Es imposible desconocer al “movimiento resistencia cívico” (estudiantes, mujeres y una vanguardia de líderes locales, regionales y nacionales) que ha participado activamente en las “batallas” heroicas realizadas, en abismal desventaja por el uso del andamiaje bélico más sofisticado, por parte de las fuerzas del orden procubano, GNB, paramilitares asesinos, todo el aparataje del Estado despótico y del poder mediático a su servicio. Por esa posición de dar la cara y estar en el campo de batalla, este “movimiento de resistencia”, ha tenido que pagar un alto costo con varios de sus integrantes asesinados, torturados, heridos, encarcelados y perseguidos. Aunque es justo reconocerlo también dirigentes y militantes de la MUD, por ejemplo, han puesto mucho de su parte para desarrollar exitosas movilizaciones de calle y distintas jornadas de protesta cívica; pero jamás al nivel de compromiso del primero, ni tampoco por los costos humanos dejados en el fragor de estas luchas.

Y eso lo saben los Castro, Maduro, Diosdado y sus esbirros incondicionales…y esa es la razón del por qué emplean todas sus triquiñuelas para vetar la asistencia de miembros del “movimiento de resistencia” al evento de “diálogo” con los representantes de UNASUR. También por las exigencias que estos últimos han planteado: liberación de los encarcelados por motivos políticos, el cese a la represión… otros puntos de agenda, etc. Además, hay mucho escepticismo por la convocatoria a este “diálogo” con los cancilleres de UNASUR, porque todos sus integrantes, en distintos escenarios, han expresado su solidaridad automática con el régimen. En el decir popular, es algo así, como “zamuros cuidando carne”. Los intereses en juego son muy complicados, porque el régimen dictatorial ha sido muy “eficaz” en proveer a sus países de los petrodólares requeridos. La ética, transparencia, principios y el derecho internacional pasan a un segundo plano o, al basurero.

La disidencia tendrá que establecer mecanismos democráticos para ponerse de acuerdo y avanzar en la construcción de una sólida alternativa libertaria y de solución a los grandes problemas que sufren los nacionales…complejo el panorama, pero ¿qué otro camino tenemos?...porque como afirma la Magistrada Blanca Rosa Mármol de León: “El que tiene un problema es el gobierno: Quiere imponer el comunismo con una Constitución que establece la democracia”. ¡Resistir y vencer!... ¡Democracia o dictadura!



martes, 8 de abril de 2014

¿DEL “SOCIALISMO TOTALITARIO”, AL “CAPITALISMO TOTALITARIO”?

Nadie puede decir: “de esta agua no beberé”, porque a la vuelta de la esquina, aunque trate de que no lo vean, los encuentran bebiendo de la misma fuente de agua. Los Castro y Maduro son el típico ejemplo, pese al disfraz de cinismo en sus rostros, de promover el odio destructivo a todo lo que oliera a “capitalismo”, hoy se abrazan e intimidad con éste, recurriendo arrastrados a saciar la “sed de la salvación, para no morir desahuciados con su fracasado proyecto del “Socialismo del Siglo XXI”. De ahí, un Maduro con su “paquetazo dictatorial” (“Plan de la Patria”) imponiéndolo a “sangre y fuego” en Venezuela y los Castros con una variante en la huida hacia adelante, pero con las “transnacionales imperiales”, convocándolas a invertir en cualquier área de la economía de la isla, menos en educación y salud. El mundo entero no sale de su asombro. Tanto nadar para terminar ahogándose en la orilla, dice un viejo y sabio corrillo popular.

Por supuesto, los Castro, ni Maduro o un Diosdado jamás reconocerán el desmadre económico, social, político y ético de su obstinado Proyecto del dizque “mar de la felicidad socialista”, financiado con los petrodólares venezolanos. Tampoco asumirán la responsabilidad de la carga monstruosa e histórica de los miles y miles de personas asesinadas, torturadas, heridas, atropelladas y encarceladas. Mucho menos asumirán la responsabilidad por el despojo arbitrario de empresas, comercios, tierras, fincas productivas, bienes e inmuebles; de la escasez, la irrefrenable inflación, sucesivas devaluaciones de la moneda o el desempleo galopante. Consecuencias, sin duda, del desplome y ruina de estos dos países, que fueron colocados en el objetivo antihistórico del derrumbe en la praxis, de la esclerosada teoría “marxistoide”.

La paja retórica “antiimperialista” y “anticapitalista” de los Castro, Maduro y Diosdado se seguirá oyendo con insistencia de sembradores de mitos, cuentos y leyendas, a través del poderío mediático y propaganda tarifada al estilo del Goebbels nazi-fascista alemán. Pero siempre la realidad será más esclarecedora y de abismal sabiduría con respecto a la teoría. Es decir: “Por más que la mona se vista de seda, mona se queda”, sí le hacemos caso al contenido de este otro adagio de la cultura popular.

Cada día son menos las personas que se dejan engañar por estos “cantos de sirenas”. Al contrario, cómo en el caso de Venezuela, ante la evidente engañifa de la utopía del “socialismo totalitario pro cubano”, un gran sector de la población del país, especialmente los estudiantes; tomaron las calles en protesta cívica, para contribuir a acelerar su derrumbe y comenzar a construir un futuro distinto con libertad, democracia, justicia, bienestar y progreso. ¡Nadie los detendrá!

domingo, 6 de abril de 2014

¡CONTROL DICTATORIAL PARA ESCLAVIZARNOS!

No es un invento “siniestro” del “imperio” o de la disidencia, la opinión generalizada de los venezolanos de considerar a la “escasez” como el principal problema que padecen, dejando a la “inseguridad” en segundo plano y seguidamente por orden estadístico descendente el “alto costo de la vida”, “desempleo” e “inestabilidad política”; sí nos atenemos a los resultados de la última encuesta realizada por IVAD en el país. O también el rechazo de los nacionales (55%) al uso de la “tarjeta de racionamiento”. O de que una mayoría sustancial de coterráneos (72%) opinen claramente de que Venezuela vive una auténtica “crisis económica”. Y concluyendo en sus opiniones mayoritarias de que, la gestión de Maduro genera “poca confianza” (66%) o “negativa” (57%). El pichón de tirano pues en creciente rodada, sin barricadas de uniformados verdes o no, que se lo impidan. La represión desatada, con bestialidad fascista, es la máscara para esconder la desnudez del fracaso del modelo de Estado y sociedad totalitario procubano.

Es una verdad como del tamaño del cielo, de que toda sociedad requiere de un “orden” para la necesaria convivencia humana, de reglas constitucionales y leyes para regular las conductas de los miembros de una determinada sociedad. Pero, en las sociedades democráticas, deben existir poderes públicos de contrapeso, para impedir que, por ejemplo, el Poder ejecutivo, imponga decisiones injustas y aplaste por razones ideopolíticas los derechos de los ciudadanos. O más aún, utilice mecanismos y procedimientos cuestionables para ejercer un dominio absoluto sobre la conducta de los miembros, porque entonces, dejaría de ser democrática: ¡nace el totalitarismo! Y éste último se reflejaría en todas las áreas de la estructura social: en lo económico, político, social, institucional, militar y mediático.

Con Chávez nace el neototalitarismo a lo cubano. Maduro ha intentado reforzarlo, pero con muchos altibajos, porque su capacidad de liderazgo y la crisis nacional actual le ha impedido conquistar metas de avance. Y porque ha sido demasiado torpe en el uso de la brutalidad represiva para darle un poco de luz al mamotreto del paradigma del “Socialismo del Siglo XXI”. O porque sin siquiera contar con el consenso de sus partidarios ha dado rienda suelta a políticas económicas destructoras de la poca calidad de vida de los nacionales (escasez, devaluaciones, hiperinflación, endeudamiento grotesco, quiebra de empresas productivas y comercios; dependencia de importaciones, desempleo y deterioro grave del salario de los trabajadores). Maduro se ha cansado de meterles autogoles a su propio desgobierno. Por ello los instrumentos de control de su tiranía agonizan, ante el empuje de las protestas sociales que claman por libertad, democracia y un cambio radical del status quo.

En su desesperación por no caer tan rápido al precipicio del fin, los “gobierneros” “cubanoides” de Maduro, tratan de alejar la agonía con la fulana “tarjeta de racionamiento de alimentos”, la Ley de Comunas o la represión fascista para tratar de infundir terror, miedo y desmovilizar a los “indignados” de Venezuela. Todos esos instrumentos de control social fueron diseñados en Cuba con el propósito de quebrar la rebeldía democrática que subyace en alma nacional. Quizás aparezcan otros, pero será imposible apagar el incendio en la pradera que ya huele a libertad y a un destino mejor. Esta pesadilla de ignominia será borrada por este pueblo heroico, con ese espíritu indomable de ansias de cambio transformador. Y abrazados de la poesía de Neruda gritaremos: “¡Mienten los que dijeron que yo perdí la luna,/los que profetizaron mi porvenir de arena,/aseveraron tantas cosas con lenguas frías:/quisieron prohibir la flor del universo/”


jueves, 3 de abril de 2014

¿REPRESIÓN PARA CAMUFLAR “PAQUETAZO” HAMBREADOR?

Sí algo aprendieron con habilidad envidiable los hermanos Castro de Cuba, para sostenerse en el poder por espacio de 55 años, son las innumerables triquiñuelas maquiavélicas de la “guerra asimétrica” para distraer a los “enemigos” ante la supuesta e interminable lucha “antiimperial”. Pero, controlando al mismo tiempo toda disidencia interna y descontento ciudadano y, paralelamente adoptando todas las medidas socio-económicas, políticas e institucionales que les ha dado la gana, amparados en el dominio absoluto sobre el aparato de Estado y la sociedad en su conjunto. ¡Una dictadura férrea! que, por inviable en el tiempo y el espacio, naufraga hoy ante una grave crisis estructural y –paradójicamente- se abraza a los “salvavidas” de las transnacionales “imperiales”. ¡El mundo mira estupefacto! ¡Y los demócratas, por supuesto, esperanzados por los cambios de fondo que allí podrían ocurrir!

Lo anterior, es una copia al carbón, de lo que ha venido ocurriendo Venezuela, a través de la implementación del Proyecto Venecuba, bajo la dirección de los Castro; quienes teniendo de mandaderos a un Maduro o un Diosdado, reeditan el modelo procubano al pie de la letra (con el concurso muy poderoso de los petrodólares venezolanos), pero con el obstáculo innegable de un movimiento disidente, irreverente, democrático y libertario, que se mantiene en la calle para combatirlo e impedir su consolidación. No obstante, para los verdugos de la libertad y la democracia, éstos jamás han perdido su tiempo, aunque marchen inexorablemente hacia al precipicio. Porque al igual que en la Cuba de los Castro, desarrollan con disciplina prusiana las líneas estratégicas del luciferino proyecto.

En consecuencia, no es al azar la brutalidad represiva contra los estudiantes, disidentes y ciudadanos en general y, esa sincronización con el “paquetazo económico” del hambre, desempleo, quiebra de empresas y comercios, devaluaciones sucesivas de la moneda, alzas impuestas de los precios con los productos regulados y no regulados; amenazas de nuevas cargas tributarias y de la alza en los precios de la gasolina. O peor la escasez y el racionamiento (a lo cubano) de la comida…entre otras perlas!

En el fondo, con la aplicación del plan endemoniado desde las Salas Situacionales de la Habana y Miraflores se está tratando de amortiguar la grave crisis nacional, por los impactos negativos de posibles grandes estallidos sociales, ante la aplicación bestial del referido “paquetazo”. Independientemente, por supuesto, de que todas las variables se les hacen imposibles controlarlas, generándose esas situaciones tan claras de ingobernabilidad, especialmente, en casi todas las grandes ciudades del país. Los desafueros evidentes de violencia inducida por los esbirros de la GNB y los paramilitares tarifados por el régimen, en contra de vastos sectores de la población civil, han generado mucho rechazo dentro y fuera de las fronteras del país. Todas las encuestas así lo confirman, con un Maduro que va palo abajo en sus niveles de popularidad y evaluación negativa de su gestión de gobierno.

La gobernabilidad del Proyecto Venecuba luce, entonces, muy cuesta arriba con este desgobierno. Por eso, al final de este oscuro túnel del totalitarismo del Estado en Venezuela, el sol de la libertad y la democracia, aparece en el horizonte con un hermoso y espectacular brillo.

miércoles, 2 de abril de 2014

¡POR QUÉ NOS ASESINAN, SI SOMOS EL FUTURO!

Si mal no recuerdo el título de este escrito, se corresponde con el contenido de una de las tantas consignas irreverentes y revolucionarias, que acompañaron y acompañan a los jóvenes universitarios y de educación media en sus luchas antisistema y la búsqueda de la concreción de sus sueños y banderas principistas por la libertad, la democracia, la justicia, la igualdad y de un futuro de bienestar para la Patria. El añejo de los años de quien escribe, pero identificado con las luchas de los jóvenes, no nos permite aceptar jamás, que la “desmemoria” de los que escriben la anti-historia de hoy, borren la esencia del planteamiento del genial Rimbaud: “la auténtica vida no es ésta, sino otra, aunque no se sepa ni dónde está ni cómo llegar”.

Quizás, los jóvenes venezolanos como el legendario Don Quijote, nunca dejarán de luchar contra los “molinos de viento”, que son por naturaleza los “malvados gigantes” de las injusticias y la negación de un futuro diferente para todos. La “locura” de enfrentar al Goliat de la “dictadura roja venecubana” con sus tanques, balas asesinas, gases dañinos, torturas y cárceles de la opresión; sólo con las hondas de la inocencia de David, no podría entenderse de otra manera, sino para empujar con sus actos heroicos las compuertas de un futuro de libertad. Así, como lo dibuja -paradójica y magistralmente- la poesía inmortal de Neruda: “Desdichas de ese tiempo parecidas a uvas/ pequeñas que agruparon verde amargo, /confusas, escondidas lágrimas de los días/hasta que la intemperie publicó sus racimos/”.

Es un claro propósito del actual régimen dictatorial de obligar a “sangre y fuego”, especialmente a los jóvenes, a que acepten un modelo ideopolítico de país fracasado, del desastre y del caos nacional en todos los órdenes del Estado y la sociedad, con la condición de que permanezcan ciegos, sordos y mudos ante esa realidad infernal sobre lo que verdaderamente ocurre. Quieren que todos naveguemos en el “Titanic” de la “V República”, sin que nada digamos sobre el seguro e inevitable naufragio de la nación entera.

Tampoco quieren que tengamos presente el uso de la razón y menos aún sensibilidad social ante las injusticias que, produce sin cesar, el desfasado totalitarismo de Estado y la construcción subterránea de los muros del “apartheid”, para quienes osen disentir. “El mal lo arrancaremos de raíz” -grita histérico- el neo-Hitler de Miraflores, acompañado de los uniformados verdes y paramilitares de la muerte y la represión brutal, a través de esas jornadas anunciadas e indignantes de “cacería de brujas” en cada recoveco del país, emulando las cruzadas del terror de la Edad Media.

Pero los Jóvenes, aunque no lo quieran los “Goliat” del terror y la muerte, seguirán cabalgando como Don Quijote, para ganarles incontables batallas a los “molinos de viento”, rompiendo los muros odiosos de las injusticias; haciendo añicos la rutina asquerosa de los rufianes de toda laya. O mejor construyendo nuevos caminos luminosos de futuro en democracia para generar bienestar y prosperidad. O mejor haciendo suyas las palabras poéticas de Neruda: “Nadie de los que ataron esta hora/de los que conversaron con el humo, /gobiernos, traficantes, transeúntes, /continuarán moviéndose en sus hilos/”.