domingo, 31 de enero de 2016

¡EL FORÁNEO DE MIRAFLORES!

Bastaría adentrarnos un poco en el contenido del extraordinario libro de mi amigo, escritor y poeta cumanés Jesús Torres Rivero, “La Huella Insondable”, para conocer un poco más de cómo a lo largo de la historia, los venezolanos logramos confluir en lo que somos hoy una “conciliación mestiza”. Así mismo parafraseándolo a él y con nuestras propias añadiduras, con el transcurrir del tiempo, con la oleada de aventureros provenientes de distintas partes del mundo (incluyendo a los hermanos colombianos), mucho ha sido lo positivo en la conformación de nuestro “ser nacional”. Pero también lo negativo, por aquello del homónimo que cita Torres Rivero en el referido libro: “De malicia y arte enjutas llegaron los hideputas”.

De individuos, provenientes del “bajo pueblo”, de la más “degradante miseria”, que en la categorización de los sociólogos, tuvieron sus oportunidades para ascender en la escala de la “movilidad social vertical” y lograr importantísimas mejoras en su calidad de vida. A aquellos individuos que no trascendieron y se quedaron a nivel de la escala de la “movilidad social horizontal”. Una muestra: un foráneo de Colombia, desde su condición de permanecer en la más la absoluta miseria en Cúcuta, a sólo alcanzar el status de conductor de autobús y luego de conductor en el Metro de Caracas, por ejemplo. Pero sin la más absoluta preocupación por siquiera graduarse de bachiller de la República.

Y luego, ¡zas! se entrecruza por los caminos de la lucha ideopolítica “marxistoide” de la naciente “Liga Socialista” en contra del dizque modelo imperante de liderazgo de la IV República. Allí en la organización fundada por Jorge Rodríguez (padre) nunca se destacó, ni tampoco alcanzó una formación idónea como cuadro político. Posteriormente, al desmembrarse esta organización aterriza en los linderos de esa gama de oportunistas de la “izquierda tradicional”, que conforman el hoy Psuv del fallecido Comandante Intergaláctico y por su heredero a dedo, el susodicho “foráneo de Miraflores” y su esposa; entre otros.

El “Foráneo de Miraflores” cultivó, sin duda el resentimiento social, que en muchas personas sobresale más que en otras. Y cuándo por azar del destino ocupa posiciones de poder le aflora hasta en la piel el despotismo o, de “”hideputas”. O más bien, como dice a la autobiografía de Pedro Urdemalas (citado por Torres Rivero): “No sé dónde me criaron;/ pero sé decir que fui/ de estos niños de doctrina…/Allí con dietas y azotes, que siempre sobran allí,/aprendía las oraciones, / y a tener hambre aprendí;/aunque también con aquesto/ supe leer y escribir,/ y supe hurtar la limosna,/ y disculparme y mentir./”. ¿No es acaso lo dicho el reflejo exacto del personaje que desgobierna al país?, pero dónde el “ser social negativo”, domina con creces al “ser social positivo”.

O en síntesis del escritor Urdemala: “Yo podré ser patriarca, /pontífice y estudiante,/emperador y monarca,/que el oficio de farsante/todos estados abarca”…Y concluye: “Sé todos los requisitos/Que un farsante ha de tener”. De allí, los enredos de la llamada cohabitación política con el “Foráneo de Miraflores”, porque el “oficio de farsante” del escrito de Urdemalas, se aferra al poder para no perderlo todo y se atrinchera en el aniquilamiento del adversario (la oposición y ciudadanos que divergen, así seamos la mayoría). Por eso, cómo, al decir de otro escritor y académico, Gustavo Luis Carrera se podrá: “cohabitar en una casa donde un inquilino aspira a expulsar al otro, desalojándolo de la parte de la propiedad que le corresponde”. Y en nuestro caso, hay que decirlo claro: toda la propiedad (el país nacional y “Miraflores”) nos corresponde y no hay cabida para los “hideputas”. ¿O no?

viernes, 29 de enero de 2016

¡SALUD NACIONAL PERDIÓ BATALLA DE VIDA!

Sí algo ha alcanzado niveles increíbles de avance en el mundo moderno es la medicina, con la gran capacidad técnica para realizar diagnósticos rápidos de enfermedades, de uso extraordinario de tecnologías biomédicas, fármacos y puesta en prácticas de cirugías inimaginables. Amén de toda la rica gama aprendida colectivamente para la ejecución de acciones en el campo de la medicina preventiva, epidemiológica, educación para la salud y participación ciudadana en salud. Es, sin duda, el presente y horizonte promisorio de países del Primer Mundo y de algunos “países emergentes del Tercer Mundo”, que se han soltado las amarras para acercarse a la luz de un mundo mejor, venciendo los obstáculos de la salud enferma en sectores de la población.

Pero, hay otro grupo de países del mundo subdesarrollado que se niegan a participar de estos desafíos y retos para vencer las enfermedades y frenar la muerte temprana de importantes grupos humanos. Bien, porque priorizan sus políticas y recursos hacia otros focos de atención (por ejemplo: hacia el derroche burocrático, corrupción o para la compra de armas para la muerte). O porque, al colocarse una camisa de fuerza ideo-política para deslindarse de esos progresos de la modernidad en el campo del conocimiento científico y desarrollo tecnológico, involucionan hacia límites insospechados, adónde las enfermedades emergentes y re-emergentes (zica, dengue, chikungunya, malaria, tuberculosis, enfermedades de transmisión sexual, enfermedades de la piel y respiratorias; entre otras) con su vocación de muerte, esperan a emboscar a miles de personas a la vuelta de la esquina. Y esto último, es lamentable decirlo, es el caso hoy de Venezuela.

La situación de pobreza de millones y millones de personas en todas sus manifestaciones en Venezuela, ha seguido su curso inexorable, pese a la retórica oficial de su reducción, amparados en cifras de dudosa procedencia y manejo astuto de algunas variables, que son condicionantes de los cuadros proyectados, por ejemplo, en el campo de la salud. Así, ¿cómo se puede hablar de una población nacional saludable?, sí en cada rincón del país sus habitantes no consiguen alimentos o las medicinas básicas para sobrevivir. O porque en el entorno ambiental de comunidades y ciudades, están colapsados los sistemas de aguas de cloacas y el servicio de aseo urbano continúa siendo un dolor de cabeza insoportable. O el servicio de agua es tan deplorable que todos los días hay protestas sociales de multitudes de excluidos, que claman por no morir de sed y exigen contar con el preciado líquido para elaborar los alimentos o, para hacerse el elemental aseo personal (hay epidemias de sarna en varias regiones).

¿De qué salud individual y colectiva pueden exaltar las voces oficialistas a través de la parafernalias mediáticas o en las Cumbres Internacionales?, cuando ante los ojos de todos, el sufrimiento humano de casi toda la población es evidente, al verse obligada a realizar gigantescas colas por horas y horas, para intentar acceso a los alimentos para la vida. O tener que deambular de farmacia en farmacia para adquirir los fármacos, que lo alejen de la muerte. El dolor de millones de nacionales no sólo es físico (al estar afectado su salud), sino también psicológico y espiritual, porque éste se proyecta al plano familiar y colectivo. Por eso, se siente cómo un dardo en el alma nacional, escuchar a un alto funcionario del régimen castro-chavo-madurista, emplazar al venezolano que sufre, con una patética burla de que: “no ingieran tantos medicamentos”, no se cepillen tanto los dientes o “váyanse a sembrar maticas de acetaminofén”.

Decimos entonces, tomando las palabras prestadas de un líder Zapatista mexicano: “Por trabajar nos matan. No hay lugar para nosotros en el mundo del poder. Por luchar nos matarán, pero haremos un mundo donde quepamos todos…”. ¡Viva la vida! ¡Viva la libertad! ¡Viva la democracia!

miércoles, 27 de enero de 2016

MADURO: ¿SIGUE SENTADO SOBRE LAS BAYONETAS?

Sí viviera Talleyrand, un estadista, diplomático, político y de una inteligencia sin igual de la época de Napoleón, se reiría a carcajada al ver con asombro a Maduro sentado sobre las bayonetas para a duras penas permanecer en el poder, hasta que el cuerpo de la soledad política aguante ¿O hasta este año 2016, como lo predicen los analistas y en especial el ex -asesor de Chávez, el sociólogo de origen alemán, Heinz Dieterich?). Porque Talleyrand, lo sentenciaba y advertía a cada rato, para referirse a los errores políticos de Napoleón a quién él asesoraba: “la bayonetas sirven para todo, menos para sentarse sobre ellas”.

No se conoce modelo sociopolítico totalitario y militarista alguno que haya sobrevivido a situaciones tan críticas y graves como la venezolana en la actualidad: la -“tormenta perfecta”- la han bautizado los entendidos en la materia ante el hundimiento absoluto de la economía nacional (quiebra del aparato productivo nacional, devaluaciones sucesivas y abismales de la moneda nacional ante el dólar, hiperinflación galopante y líder planetario, déficit de dólares para importaciones, escasez grave de alimentos, medicinas y rubros básicos; bajón de los precios del petróleo, endeudamiento atroz con China a cambio de petróleo a futuro; caída drástica de las reservas nacionales…). Es decir, el uso de las bayonetas para apagar los posibles estallidos sociales, el hambre colectiva y la desesperación de la gente; resultaría -a todas luces- insuficiente, a no ser que se pretenda superar en hazañas genocidas y criminales otrora Hitler alemán o del Pinochet de Chile.

Todas las estrategias de distracción del foco central de la crisis se han caído ante el peso de la realidad, por ejemplo, con lo de busca pleito, al incentivar esa especie de “nacionalismo a ultranza” para que fluya una confrontación (¿salvadora?) con EEUU, Colombia o España. ¡No lo han logrado! porque hay un inmenso despertar de la conciencia de las mayorías nacionales (¡jamás analfabeta!), que han aprendido a oler las mentiras, manipulaciones y retórica insulsa. El 80% de rechazó a Maduro de la población nacional (según la mayoría de las encuestas) es un indicador indiscutible de que la gente no está comiendo cuentos. Así condenen injustamente en la cárcel (para intentar sembrar miedo colectivo) a opositores con sanciones extravagantes, monstruosas e inaceptables (casos: Leopoldo López, Ledezma, Baduel, estudiantes y el resto de los presos políticos).

El aislamiento político del régimen es inexorable ante los nacionales y el mundo entero. La derrota política con la pérdida de la mayoría de la Asamblea Nacional los tiene al borde de la locura total. Sólo les quedan las bayonetas de la represión y acciones de “terrorismo de estado” (con ayuda de sectores tarifados del lumpen, delincuentes o escoria social). El “castro-chavo-madurismo” ha destrozado, sin remordimiento alguno, los valores democráticos y derechos humanos a la vista de todo el planeta. Se han colocado de espaldas a las sabias reflexiones de Talleyrand: “Jamás estar aislado, no importa lo poderoso que se sea. Y esa es toda la política”. No tomar en cuenta lo dicho por él, hasta hoy ha tenido nefastas consecuencias para los amos del poder temporal en cualquier sociedad y, más aún entre los regímenes totalitarios. Amanecerá y veremos. ¡Unión, organización y lucha para vencer!... ¡Viva la libertad y la democracia!

lunes, 25 de enero de 2016

¡HAMBRUNA A LA VUELTA DE LA ESQUINA!

No es una fantasía, ni mucho menos retórica vacía, la amenaza real de posibles estallidos sociales en esta Venezuela del drama humano más espantoso que se haya conocido en toda su historia. Son millones de personas que andan como zombis, de un lado a otro, buscando con desespero los alimentos y en menor medida las medicinas para tratar de sobrevivir. Mientras ya fatigados por pasar horas interminables en una cola por la escasez, regresan al hogar, rodeados de aquel entorno angustiante de vida miserable y desesperanza. Pero también, viéndoles de cerca el rostro por el sufrimiento, uno llega a la conclusión que hay una mezcla preocupante de impotencia, temor e incertidumbre por la amenaza de hambre en la familia y de ira contra los amos del poder, responsables del infierno en que se encuentran.

Sí años atrás la palabra, el concepto o la trampa mediática ideológica sobre “revolución” adormecieron a las mayorías nacionales con la promesa del “mar de la felicidad”, el crecimiento de la pobreza y la hoy amenaza real de hambre, se han encargado de ponerles los pies sobre la tierra. Y el clamor nacional se escucha en toda la geografía del país: ¿de qué revolución hablan?, porque el sentimiento general está asociado a un vil engaño, a una farsa sin precedentes, en el cual todo lo cambiaron, pero nada cambiaron. Por eso las injusticias, la desigualdad y las iniquidades sociales siguen reinando en el país, en una especie de conjura diabólica, que ha conducido a todos hacia el abismo, al precipicio del no retorno; al hambre que ya cruje en el estómago de los que nada tienen.

¿Quién puede dudar de la existencia de hambre en Venezuela?, sólo algunos desinformados, minorías privilegiadas o dogmáticos en el plano ideológico y defensores incondicionales de la tiranía, podrían negar tal realidad. Sí; a la vista del mundo nacional e internacional la escasez de alimentos, que afecta a los nacionales ronda en muchos rubros básicos hasta el 80%, con posibilidades de aumentar este año 2016 (amén de los altos precios). Son millones de venezolanos que se acuestan sin probar alimentos. Miles de niños, adultos y ancianos viven en las calles, hurgando en la basura o mendigando un mendrugo de pan. La hambruna ya no son prosas imaginarias de la literatura universal, porque en Venezuela ha habido un deslave social para situarse entre los países del planeta con las peores cifras rojas de vida miserable.

La cohabitación entre desgobierno rojo rojito y la oposición, que muchos proponen para salir de esta terrible crisis nacional, encuentra el muro infranqueable de los dos modelos de Estado y sociedad en juego por el poder (democracia y dictadura). Con la añadidura positiva de que una mayoría nacional votó a favor del cambio (por la democracia) este pasado 6D. La renuncia de Maduro, ante el desastre de su gestión y modelo totalitario impuesto, podría destrancar el presente y cerrado cuadro ideo-político de los actores enfrentados. Y el flagelo del hambre encontraría un desagüe apropiado para su freno a corto y mediano plazo, para bien del colectivo y las futuras generaciones. ¿Quién le pone el cascabel al gato?


domingo, 24 de enero de 2016

¿LA “REVOLUCIÓN” TIENE SU BURGUESÍA APÁTRIDA?

Tanta retórica y habladera de paja dizque “revolucionarios” de pacotilla y supuestos defensores del “pueblo excluido y oprimido” y, resulta que, en la oscuridad de la noche, la élite corrupta chavo-madurista transan negocios turbios, a través de la mampara del Estado “socialista”; para beneficiarse de los fondos públicos, la riqueza petrolera, inmensos dividendos que produce el gran negocio del narco-tráfico, compra de armas y el régimen cambiario con dólares. Verbigracia el fortalecimiento de industrias, comercio y de la banca roja rojita.

De esta forma, el “gamelote tercer mundista” sobre la propuesta de una “alternativa distinta al neoliberalismo”, se quedó desde hace tiempo empolvado en los santuarios paganos y en los altares para el culto a la personalidad del fallecido caudillo de Sabaneta. En consecuencia, nunca habrá el cacareado modelo económico “humanista”, “autogestionario” y “endógeno”, conque edulcoran las funciones de circo para el público de galería nacional e internacional. Porque en los pasillos del mundo político y de la economía se habla de la “nueva burguesía emergente roja rojita”, que se ha aprovechado de los “abrazos solidarios” para el privilegio mutuo con los “altos enchufados” del presente desgobierno de claro perfil totalitario.

El listado de esta nueva burguesía recorre como el viento cada rincón del país, que ha dejado boquiabiertos a tirios y troyanos: los Vollmer (Mercantil, Ron Santa Teresa), Cisneros (Digitel, Cisneros Group), Dorado (Italcambio), Van Dam (industrias), Cedeño y Tirado (Stanford Bank, Unovalores), Mazherane (Banco Federal), Torres Ciliberto (Beninvest). Amén de las empresas fantasmas (dólares cambiarios/Cadivi) del gran capo del Furrial , Halvorssen (electricidad), Betancourt y Trebbau (bolichicos) y; un largo etcétera. La frase emblemática de la política como arte de lo imposible a lo posible. Lo convirtieron en los grandes negocios económicos como el arte de pasar de lo imposible a lo posible, incluyendo a esta “nueva burguesía apátrida” en tiempos del “Socialismo del Siglo XXI”.

Algunos de hemos tocado el tema del modelo macro prevalente en Venezuela, hemos insistido en el perfil de un vulgar y salvaje “Capitalismo de Estado”, absolutamente deshumanizado, corrupto, perverso, militarista y hambreador. Y los integrantes de esa “burguesía roja rojita”, en contúrbenlo con el Estado despótico, han hecho posible este monstruo infernal, que la propia Medusa de la mitología griega se habría asombrada. Y los millones y millones de “condenados de la tierra y descamisados”, como siempre, bajo la más luciferina realidad cruel de sufrimiento social, económico y calidad de vida.

Y en este caso, a manera de conclusión, ya no son sólo los actores de este desastre los que hay que defenestrar del poder, es el paradigma del Capitalismo de Estado” y su expresión la tiranía chavo-madurista, para dar paso a la libertad, la democracia, la soberanía auténtica, el respeto a los derechos humanos y el progreso para todos. ¡Este es el camino del verdadero cambio!

jueves, 21 de enero de 2016

“SOBERANÍA” MAMPARA VIOLACIÓN DERECHOS HUMANOS

Bajo las instrucciones del régimen castrista y siguiendo fielmente su guion, desde la época de los desgobiernos del “Comandante Intergaláctico” hasta el hoy también desgobierno de Maduro, el tergiversado concepto de “soberanía” se ha venido utilizando como mampara para ocultar las brutales violaciones a los derechos humanos de los nacionales y en especial de la vanguardia opositora y disidente. E incluso mucho más allá, para ocultar las trasnochadas alianzas subterráneas con grupos irregulares del submundo de la subversión guerrillera y terroristas de toda laya del campo internacional (¿frente mundial “antiimperialista” contra EEUU?). O cómo se ha ventilado (gran prensa mundial) y procesando (en Tribunales gringos) de la participación activa de grandes enchufados civiles y militares de la tiranía chavo-madurista en el gran negocio del narcotráfico internacional. Las evidencias sobre lo dicho forman parte de los frondosos expedientes a los referidos personajes que están privados de libertad en las cárceles gringas o, que están señalados públicamente, pero gozan de la protección del Estado totalitario en tierra venezolana (¿?).

De esta manera con el argumento discutible de defender a ultranza la “soberanía nacional” y siguiendo los elementos de la direccionalidad del “castrismo” – Chávez antes y ahora Maduro- han bailado joropo sobre los derechos humanos de los venezolanos, al utilizar estrategias que van desde el uso del estamento legal (cuando les conviene) a lo ilegal y viceversa. O de lo institucional a lo no institucional y, al revés. O más aún con la consabida alianza cívico-militar con sus acciones políticas han mantenido siempre en tensión a la sociedad y al Estado. Pero enseñando constantemente los dientes de la amenaza de hacer uso de la “revolución armada” (“militares afectos” y “colectivos armados”), cuando las circunstancias políticas no le son favorables. Amén de la trillada “olla” de las “conspiraciones” recurrentes para reprimir, encarcelar y violar los derechos humanos de los que piensan distinto a su fundamentalismo ideopolítico “marxistoide” (Leopoldo; Ledezma, Baduel, Afiuni, Ceballos…estudiantes).

Pero estas posturas cínicas de la supuesta defensa de la “soberanía” de Venezuela para hacer todo lo contrario de su retórica “humanista”, contra las “injusticias sociales”, “inequidades” y “defensa de los derechos humanos”, se caen por el propio peso de la realidad, la verdad y la razón: crecimiento de la pobreza y la exclusión social, deterioro grave de las condiciones de vida de todos los miembros de la sociedad, en especial de los más pobres; escasez de alimentos y medicinas, quiebra de la economía productiva, desempleo, hiperinflación, grave situación de violencia e inseguridad personal; resurgimiento de las enfermedades prevenibles e inoperativa de los servicios de salud por falta de equipos e insumos y; pare usted de contar. Así sea, el deslave ético por la corrupción, derroche, narcotráfico e ineptitud gerencial.

Sin duda alguna, caminamos hacia un cambio radical de este paradigma fracasado, hipócrita, mentiroso y falso con la victoria política opositora alcanzada el 6D. Pero el camino sigue siendo espinoso y difícil. Pero el grito de libertad y democracia ya alcanzó a todos los estratos sociales y, se escucha con mucha fuerza en las esferas internacionales, para que unidos, organizados y movilizados podamos ver en definitiva la luz del túnel.

lunes, 18 de enero de 2016

EL NUEVO “PAQUETAZO” DE MADURO

Sí algo aprendieron Maduro y Diosdado de Fidel, Raúl y del fallecido caudillo de Barinas, ha sido copiarse de muchas lecciones y experiencias para los chanchullos, la trampa, las zancadillas, la intriga y las perversidades de toda laya para estructurar y desarrollar planes maquiavélicos e infernales direccionados a mantenerlos en el poder como sea. Por eso, no es una sorpresa que los mismos estén implementando el “Plan B”, una vez, se conocieran los resultados desfavorables del pasado 6D.

De esta manera, las primeras acciones que contemplaron son testimonios irrefutables: reestructuración del TSJ con la designación a dedo de magistrados incondicionales a la tiranía, las impugnaciones “chimbas” de los diputados indígenas, los cambios en el gabinete, la contraofensiva mediática de supuesta defensa a ultranza de “símbolos patrios chimbos” y el reciente “Decreto de Emergencia Económica”. Todo ello, sin duda, forman parte del nuevo “paquetazo” de Maduro y Diosdado contra el pueblo oprimido y la vanguardia disidente.

Con la maniobra política de tratar de convertir el TSJ en una especie de contrapoder incondicional del Ejecutivo Nacional, para deslegitimar a la nueva Asamblea Nacional. La tiranía juega al ajedrez político de colocar al Poder Judicial en el caballo de Troya contra la “rebelión de las masas”, que se expresó a favor del cambio en todos los niveles de la estructura del Estado y, ante las calamidades socio-económicas que sufren en carne propia todos los integrantes de los distintos estratos sociales del país. Es inadmisible y anti-constitucional que los déspotas de Miraflores desconozcan el estado de derecho y el equilibrio de poderes, donde la AN cumple un rol estelar en la defensa de la soberanía popular, de control y legislar a favor de los supremos intereses colectivos.

En referencia al cuestionado Decreto de Emergencia Económica, Maduro y Diosdado, pretenden continuar conservando el poder absoluto sobre la sociedad y el estado, mediante los instrumentos perversos de las Leyes Habilitantes (que incontables, no hicieron mella positiva sobre el caos reinante). El decreto, está claro, es una nueva “habilitante soterrada”, en el cual el Ejecutivo Nacional, entre otras cosas, puede expropiar empresas y comercios, generar sus propios requisitos para trámites de importaciones, realizar compras expeditas de mercancías y manejar a su antojo los procedimientos cambiarios. Además, de dejar al libre albedrío de este desgobierno lo referente al proceso de abastecimiento y comercialización.

Todo lo dicho, encierra sin duda, una dura lucha entre la nueva AN y el pueblo mayoritario en contra de la tiranía y sus poderes constituidos lacayos e incondicionales. Las consecuencias de esos choques inevitables hace muy difícil predecir el desenlace final. Y lo peor, sobre los hombros del pueblo seguirá la espada de Damocles del sufrimiento humano por la escasez de alimentos y medicinas, el crecimiento de la pobreza y vida miserable, la inseguridad personal, caos y ruina absoluta del país. La lucha colectiva no ha cesado y apenas comienza una nueva etapa superior, que deberá abrir luces definitivas de libertad, verdadero estado de derecho, democracia, progreso y bienestar para todos. El dilema sigue siendo: dictadura o democracia. ¡Tú decides!


sábado, 16 de enero de 2016

¡CIRCO ROJO O LA TRAGEDIA NACIONAL!

Maduro, Diosdado e incondicionales que viven de la ubre del Estado y de su ancha red de negocios subterráneos, no cesan en su afán circense de mostrarse radicalmente diferentes a la realidad, a la verdad y a la razón. Quizás en sus andanzas por los temas metafísicos y adoraciones oníricos ante los altares del Comandante Intergaláctico, pajaritos que les hablan o por los supuestos mensajes recibidos en los rituales paganos de origen cubano; viven el mundo de lo absurdo y surrealista, al símil de Franz Kafka en su obra “Metamorfosis”. En ésta, el protagonista Gregorio Samsa, agobiado por los problemas sociales, económicos y otros de la vida cotidiana de la época, despertó un día convertido en un monstruoso insecto. En parangón con los personajes dizque “revolución socialista”: de teóricos “humanistas y demócratas” en auténticos déspotas, tiranos, corruptos y violadores de los derechos humanos de todos los venezolanos. Son hoy unos verdaderos monstruos fascistas, pues.

El Decreto de Emergencia Económica y la presentación de la supuesta “Memoria y Cuenta” ante la Asamblea Nacional por Maduro, son en esencia más de lo mismo: disfrazar como en los circos la realidad social y, entretener hasta donde puedan a las mayorías nacionales que viven el drama humano de todos los días de buscar con desesperación, de un lugar a otro, los alimentos y medicinas para la vida. O de sortear las balas de los asesinos del hampa, que jamás tienen compasión con la vida de niños, jóvenes, ancianos o de los que apenas han podido alcanzar la madurez de la vida. 17 años de mentiras, manipulaciones y falsedades no pueden ser escondidas con frases, cifras y supuestas buenas intenciones a favor del “Pueblo”, la Patria”, la “Revolución” y el “Socialismo”.

Porque detrás del telón del circo, los personajes de la vida real del “Socialismo del Siglo XXI” se han movido en las sombras de la oscuridad para construir sus imperios de la corrupción, el narco lavado y de la vida dispendiosa en el país y más allá de nuestras fronteras. Amén de no escatimar esfuerzos para acallar las voces críticas y disidentes con el “garrote vil” de la represión, cárcel, torturas, hostigamiento y hasta el asesinatos de nacionales. La perversión maquiavélica, cuyo instrumento de acciones brutales es el “Terrorismo de Estado, ha sido centro de debates, llamados de atención y medidas de la ONU, OEA, Unión Europea, Parlamentos del mundo entero, Iglesia Católica, Prensa Mundial, EEUU y de Ex-Presidentes de la República del planeta (organizados) para la vigilancia y condena de las atrocidades de la tiranía.

Es verdad que nadie puede dejar a un lado la posibilidad de un proceso negociado de transición pacífica, democrática y constitucional (experiencias históricas las hay en abundancia), pero también la historia nos ha demostrado que muchos monstruos sociopolíticos (como el insecto surrealista de la obra de Kafka) no admiten abrir las compuertas de cambio. Y lamentablemente los enfrentamientos violentos en la lucha por el poder se sumarían a la tragedia nacional del no retorno a la vida (en poco tiempo) de libertad, democracia y futuro de progreso y bienestar para todos. ¡Dios nos agarre confesados y logremos superar esta etapa gris de la vida histórica de la República!

jueves, 14 de enero de 2016

¡SIN ÉTICA POLÍTICA NO HABRÁ CAMBIO!

Cualquier nacional que revise un poco el contenido de la jerga mediática y profundo proceso de ideologización compulsiva en todas las instancias del Estado y la sociedad, a nombre de la “revolución bolivariana”, “Socialismo del Siglo XXI y toda la retahíla de categorías “marxistoides” y “cubano-castrista”; se podrá dar cuenta del coctel de “lavado de cerebro” a que ha estado sometido el pueblo venezolano por espacio de 17 años. Pero cómo ocurrió con todos los países satélites del denominado “socialismo real”, bajo el liderazgo de la Unión Soviética, toda esa parafernalia quedó reducida a polvo cósmico. Por una razón muy sencilla: absoluto divorcio entre el paradigma ideopolítico y la desastrosa realidad socio-económica de las mayorías nacionales. Y sobre todo, por el total desplome ético de la élite de poder “chavo-madurista” y enchufados incondicionales.

Así, casi a diario, la prensa nacional e internacional informa sobre escandalosos casos de corrupción y narco-lavado, donde están involucrados connotados personajes del mundo cívico-militar de la cuestionada y fracasada “revolución socialista bolivariana”. Cuestión que, por cierto, las castas de poder rojo rojito, mantienen silencio sepulcral o lo despachan con la simple excusa de que eso es por la “obra maléfica” de los “apátridas” o de la “burguesía pitiyanqui” para desacreditarlos. No obstante, hay testimonios irrefutables de la acumulación desmedida de capitales financieros y bienes suntuosos de toda laya en tierra venezolana y en el exterior (Europa, EEUU y América Latina) en manos de los hoy llamados “boliburgueses” y de los “narcosoles”, por ejemplo. Los pregonados códigos morales dizque consustanciados con la ideología revolucionaria, se han pulverizado con la realidad y la verdad de la praxis social corrupta de los protagonistas de esos hechos por demás abominables.

De esta manera, en el ejercicio de la política cotidiana y de la función pública el discurso “revolucionario” exalta los valores y principios éticos y morales universales, pero en su vida subterránea y en la oscuridad de la noche, los actos delictuales de enriquecimiento ilícito y el gran negocio de las drogas dejan boquiabierto a gobiernos, organismos internacionales y a inmensos grupos poblacionales del mundo entero. Peor aún: esa bipolaridad conductual (ética-antiética) se cometen sorprendentes crímenes socio-culturales al dejar a millones y millones de excluidos sociales (que creyeron a ciegas en ellos) en la más espantosa orfandad, desesperanzados y de no creer en nada, ni en nadie. O en la vida material: sometidos (los pobres) a las más brutales de las injusticias sociales al carecer de alimentos y medicinas para la vida. O haciendo colas interminables, de horas y horas, para apenas acceder a un mendrugo de pan, en aras de la sobrevivencia humana.

En Venezuela los amos del poder despótico, amparados en ese arsenal fastidioso ideo-politiquero con mezcla de maquiavelismo pusilánime, están mostrando al desnudo su absoluta decadencia, a tal punto que ya Maduro él de Miraflores, mantiene en su haber más del 80% de rechazo de la población y su modelo socio-político acaba de recibir la más estruendosa derrota el pasado 6D. Se resisten al cambio, pero todo el que va morir (dice un viejo dicho) patalea. El cambio propuesto debe ser profundo para que sea auténtico. Y si no se acompaña de valores éticos y principios universales sería más de lo mismo.

sábado, 9 de enero de 2016

“GARIMPEIROS” DE MADURO CONTRA INDÍGENAS

Nunca como antes el despotismo centralista que simboliza la tiranía de Maduro había perseguido y atropellado con tanta saña a los indígenas del Estado Amazonas. Así, una y otra vez, se repiten los inmensos latigazos de las injusticias contra los pueblos originarios, que sumado al acoso de grupos irregulares y aventureros de toda laya, ahora los “garimpeiros” de Maduro (esbirros de la policía política/Sebin, Psuv y Sala Electoral “chimba” del TSJ), están montando una olla perversa y criminal para defenestrar a los recién proclamados diputados indígenas de la oposición democrática, con el cuento de un supuesto fraude electoral 6D, que se habría cometido en aquel extenso territorio venezolano de frontera y selva.

De esta manera, los “garimpeiros rojos rojitos” de este fracasado desgobierno, quieren reeditar la hazaña del uso de la violencia de los “garimpeiros” brasileros (década de los 90) contra la indianidad, cuando éstos aventureros (afortunadamente) fueron frenados por el Ejército Venezolano al sorprenderlos causando estragos ecológicos en las cabeceras del Orinoco, para apropiarse del oro y diamantes del subsuelo nacional. En este caso, por instrucciones de esta mafia de poder, a sabiendas de la vulnerabilidad en estas zonas tan apartadas y abandonas del país (y con un estado de “excepción a cuestas”) pretenden forjarles expedientes a conocidos dirigentes indígenas opositores, usando el cañón del “terrorismo de estado”.

El anticolonialismo que la retórica vacía promueven los “jeques revolucionarios”, lo copian y aplican con maestría envidiable, pero al revés, cómo un auténtico colonialismo para hacer de lo establecido en la Constitución Nacional y demás leyes sobre los derechos de los indígenas en letra muerta. O mejor, como esa intrincada selva del Amazonas, pretenden enmarañar los resultados electorales del 6D, tratando de transformar la realidad del hecho electoral triunfante para la oposición, en leyendas de dudas que ni siquiera las cristalinas aguas del Río Padre podrían limpiar.

Desde esta trinchera de lucha, clamo por la libertad de los dirigentes indígenas detenidos y por el cese inmediato a la persecución de los miembros de la vanguardia opositora regional. Y convoco a toda la dirigencia y críticos conscientes del país a elevar su voz de protesta contra los abusos de los “garimpeiros” de Maduro, para que reine la tranquilidad entre los 14 grupos étnicos que viven en nuestra Amazonas Venezolana.

Para que los indígenas con su sabiduría ancestral continúen protegiendo las fronteras, la magia de la selva y del soberbio Orinoco y, se mantenga incólume éste sobre los nichos de piedra del macizo Guayanés. Y nuestro país como un todo, se nutra por siempre de la vida que proporciona el caudal extraordinario de sus aguas dulces.

viernes, 8 de enero de 2016

DOGMA ROJO: ¡ANTIDIÁLOGO, ANTIDEMOCRÁTICO!

Los que se aferran a dogmas ideopolíticos (con una mezcla de negocios oscuros e inconfesables) son por naturaleza social contrarios al diálogo, al debate de ideas, a la aceptación de las críticas y a reconocer que hay personas que piensan distintos a ellos. Por eso, son muy pocas las diferencias entre el dogma fundamentalista sustentado por los miembros de ISIS, la Farc de Colombia, el “castrismo” cubano o los chavo-maduristas de Venezuela. Aunque mantienen en común el pragmatismo de aferrarse a los métodos y procedimientos “terroristas” (incluyendo al “terrorismo estado”) para despachar a otro mundo a los que consideran sus enemigos en las esferas de las ideas o, de peligrosos opuestos en la lucha por el poder y espacios de dominio geopolítico. Tampoco mantienen límites éticos a la hora de amasar como sea capitales, instrumentos para la muerte o en el negocio del narcotráfico para los mismos fines y enriquecimiento privilegiado de los miembros de la élite de vanguardia. En consecuencia sólo “dialogan” con los de la acera del frente (demócratas, por ejemplo), sí ello le permite avanzar hacia la conquista de objetivos y metas en esa direccionalidad predeterminada.

En ese sentido, no debe sorprendernos la histeria desatada por los miembros de las castas de poder cívico-militar en Venezuela, por la reubicación de unos cuadros con los perfiles de un Bolívar “chimbo” y del fallecido “comandante intergaláctico”, ante instrucciones de la nueva directiva de la Asamblea Nacional, en representación de la mayoría del pueblo venezolano (recordar la paliza electoral infringida el 6D a la tiranía dogmática del cacareado “Socialismo del Siglo XXI”). Porque el dogma inculcado por el castro-chavo-madurismo es la defensa a ultranza de la fracasada “Revolución”, sin importar que la gente pase hambre, los niños y ancianos no tengan medicamentos para la vida, millones de nacionales tengan que calarse interminables colas por un mendrugo de pan o, todos tengamos que esperar de brazos cruzados el “tiro de gracia” ante una delincuencia criminal desbordada. La lógica de la realidad y la verdad le anteponen la lógica cuestionada del dogmatismo ideopolítico “comunistoide”. Por eso (por ejemplo), ante el estupor del mundo, la diputada Tania Díaz (Psuv) afirmó: “ante la verdad de la realidad, primero la verdad de la revolución”.

También para la cúpula de poder en Venezuela, el antidiálogo y las posturas antidemocráticas se constituyen en esencia su razón de existir, de conservar el poder como sea, de mantener sus privilegios ostentosos, de continuar medrando de los recursos públicos y la riqueza petrolera o, de los suculentos dividendos que le proporciona el gran negocio del narcotráfico (léase sobre los altos enchufados rojos rojitos y narco-sobrinos de Cilia investigados por la DEA y Tribunales de EEUU). Cerrarse al diálogo con la oposición democrática le pondría freno (estrategia oficialista) a ser investigados por los diputados de la nueva Asamblea Nacional. Se juegan el todo o nada, a nombre de la “Patria”, “La “Revolución”, “El pueblo”, “La soberanía nacional”…

El contenido de la Constitución Nacional es echado a la basura, en relación a principios y normativas expresas: el derecho consagrado de respeto a los derechos humanos de todos los ciudadanos en cuanto a alimentación, salud, seguridad personal y calidad de vida. O en definitiva, cuando la gestión de gobierno no resulta positivo a los intereses colectivos, los ciudadanos tienen el pleno derecho constitucional de buscar una salida pacífica y democrática de cambiar a la actual y fracasada “oligarquía institucional roja rojita” y a su infernal modelo socio-económico totalitario.

miércoles, 6 de enero de 2016

LA AGONÍA DE LA TIRANÍA

El parapeto dictatorial monstruoso montado por el fallecido “Comandante Intergaláctico” y su hoy heredero fracasado de Miraflores, está sin duda llegando a su fin, porque todo se ha venido derrumbando como un castillo de naipes. Salvo -una que otro pataleo de agonía- del régimen que se niega a morir. Es así, como quedó para el museo de la historia las parafernalias rimbombantes de aquellos circos mediáticos de los famosos “Aló Presidente”, cuando el caudillo “militaroide” de Sabaneta anunciaba los famosos “ejes estratégicos” de su fantasiosa revolución, cuyos resultados son en el presente el hazmerreír del mundo.
El “eje político” para la construcción de la “democracia bolivariana”. La única dizque “democracia construida” fue para los boliburgueses, altos enchufados corruptos y narcosoles, quienes han hecho los que le ha dado la gana con el erario público, la riqueza petrolera y el lavado de dólares; fuentes inagotables de enriquecimiento ilícito y acumulación de capitales en bancos de Europa, EEUU y América Latina. Para el pueblo de a pie, clase media y burguesía nacional: represión, torturas, cárcel, hostigamiento y hasta asesinatos; una dictadura pues.

El “eje económico” (“modelo productivo”, “humanista”, “sustentable” y “diversificado”), sólo se quedó en el anuncio de la retórica vacía. Nunca se hizo realidad. Quebraron el aparato productivo nacional y se aferraron a las importaciones para los negocios oscuros y el latrocinio. La deshumanización es lo que ha privado: “pobreza crítica” de millones de nacionales que se ha incrementado aceleradamente, la escasez infernal de alimentos y medicinas, los altísimos precios de todos los productos y servicios y, el desempleo que mantiene en vilo la calidad de vida de los nacionales. Amén de las devaluaciones sucesivas de la moneda nacional, la carencia e incremento desmesurado del valor cambiario del dólar. El bajón de los precios del petróleo, deslave de las reservas monetarias, déficit abismal del crecimiento económico y el derrumbe estrepitoso del modelo económico totalitario “socialista” que jamás fue ni “sustentable”, ni “diversificado”.

El “eje social”. Ídem del “eje económico” con el añadido del aumento inimaginable de la injusticia social, con ese cuadro dramático y desgarrador de millones y millones de excluidos de cola en cola o, de un sistemático deambular diario para tratar de acceder a productos y servicios para la vida. La metas de reducción de la pobreza se invirtieron más bien hacia la sobrevivencia humana, peor que los dramas sociales de las guerras en Siria, Afganistán o Irak. A los trabajadores se les mantiene con salarios de hambre y apenas sobreviven.

El “eje territorial” para la supuesta “desconcentración del poder” y el “desarrollo equilibrado”. También se hizo todo lo contrario: se concentró el poder absoluto en manos del caudillo fallecido o del hoy pichón de caudillo de Miraflores (dependencia de todos los poderes públicos del poder ejecutivo, leyes habilitantes y demás yerbas del muestrario totalitario). Apareció con más fuerza el desequilibrio y el anti-desarrollo a lo largo y ancho del país. Y las regiones (incluyendo la región capital) hoy están menos desarrollada y con más desequilibrios de poder que nunca.

El “eje internacional” (“fortalecer la soberanía” y el “mundo pluripolar”). No somos un país soberano porque hoy somos un país dependiente políticamente de la tiranía castrista y en el plano económico de China y Rusia. El “antimperialismo gringo” y contra el mundo occidental ha sido la “hoja de parra” para entregar la soberanía nacional a los países mencionados (firmas a largo plazo de convenios leoninos y entreguistas). La retórica de la tiranía sobre la defensa a ultranza de la “soberanía nacional”, es para esconder sus graves delitos de lesa humanidad, con la violación descarada de los derechos humanos de los venezolanos.

Con el triunfo político-electoral del 6D, la oposición democrática abrió las compuertas para desmontar los monstruosos parapetos para-institucionales y contra la Constitución Nacional, que a lo largo de 17 años, ha cabalgado la ignominia del neofascismo castro-chavo-madurista ( o “Socialismo del Siglo XXI”). ¡La tiranía agoniza: debemos empujarla para que termine de morir!