NEO-FASCISTAS DISFRAZADOS DE “CAPERUCITA ROJA”

El anuncio público de Maduro, semanas atrás, de que Venezuela entraría en la fase del “colapso total” se está cumpliendo al pie de la letra, pero no porque responda a supuestos planes ocultos de la “disidencia democrática”; sino porque desde la Habana, bajo la dirección absoluta del régimen dictatorial castrista, se había diseñado un Plan estratégico con este fin, en los términos de la manoseada tesis marxista de “destruir definitivamente el orden capitalista”.

El dogma ideopolítico a la vieja usanza del “socialismo real” nunca fue apartado de los sueños de los dos octogenarios autocráticos de esa simbólica isla del Caribe. Quienes se encontraron con la manguangua entreguista ofertada por el fallecido caudillo de Sabaneta -de entregarles la Patria de Bolívar- a cambio de aplicar la receta marxistoide en esta Venezuela de enormes riquezas petroleras, con el acicate de las chequeras sauditas de los petrodólares para la sobrevivencia del régimen. Y por supuesto de garantizarle al “Comandante Supremo” y su combo de enchufados el control absoluto de poder sobre el Estado y la sociedad criolla, con las lecciones aprendidas durante 53 años de dominación férrea cívico-militar en la hoy esclavizada Cuba, sin ver la luz de la libertad y la democracia.

De Joseph Gobbells el nazi-fascista sobresaliente de Hitler, aprendieron los métodos y las técnicas para manipular y engañar a las grandes masas populares, cómo esa de repetir y repetir mentiras para convertirlas en verdades o controlar todos los medios de comunicación y centralizar los mensajes propagandísticos del Estado con un claro contenido ideopolítico de dizque “salvar a la Patria”. O esas discriminaciones odiosas e inaceptables entre vastos sectores de la población (recordar al actual régimen: “patriotas”, los incondicionales a su pensamiento y actuaciones del “mesías” y los “antipatriotas”, los que piensan distinto o los “enemigos” a “pulverizar”).

Esa coctel (recetas marxistas con nazi-fascismo) ha generado en el régimen cubano y sus discípulos de la casta del poder nacional rojo rojito hacer lo mismo en materia de control de los ciudadanos, lo mediático, la economía, los poderes públicos, lo militar y una administración de justicia absolutamente parcializada (“buenos” son ellos aunque sean unos pillos y los “malos” los disidentes, no obstante sean inocentes de los cargos). La Dictadura Cívico-Militar cubana o el Castro-chavismo-madurista en Venezuela es el mismo instrumento de poder “legitimado” para hacer lo que les de la gana en todos los órdenes de la vida nacional. Así las “Damas de Blanco “en Cuba son víctimas de una intensa cacería casi diaria (represión y cárcel). En Venezuela los miembros de la “disidencia democrática” le aplican la misma fórmula de ese despotismo cruel.

Allá en Cuba todas las grandes decisiones de Estado y la “propaganda gobbelliana” la ejecutan a nombre de Fidel. Aquí en Venezuela lo hacen a nombre del fallecido Chávez. De esta manera, por ejemplo, el renombrado “Plan de la Patria”, que no es más que un mamotreto “Venecubano”, adónde seguirá salpicando el caos nacional, la corrupción y la ineficacia oficialista; se constituye en una especie de ejercicio de exorcismo dizque “ordenado” por el “Comandante Supremo”. Y para continuar la engañifa decretaron el 8D (El mismo día de las elecciones municipales) como el de la “lealtad y el amor” al difunto.

¿No es el mismo mito y mesianismo que crearon los nazi-fascistas alrededor de la figura de Hitler? ¿Cuál es la diferencia entre el mito generado en aquél y el creado por los enchufados sobre las figuras de Fidel y Chávez? ¿No es el mismo musiú con diferente cachimbo? ¿Quién puede dudarlo? ¡Vota por cambio este 8D, por la libertad y la democracia! ¡Si no votas estas convalidando la entrega completa del país al régimen fascista Castro-cubano!