martes, 10 de marzo de 2015

¿”GUERRA ANTIIMPERIALISTA” PARA OCULTAR EL EXCREMENTO?

Es consabida la lucha de intereses geopolíticos en el mundo entero de los “imperios” (llámese de EEUU, China o Rusia), pero ello no puede servir de excusa para que a nombre de una supuesta lucha “antiimperialista” se traten de ocultar bastardos intereses de élites de poder en aras de mantener sojuzgados a los pueblos y éstas acumular privilegios y riquezas mal habidas en detrimento de las condiciones y calidad de las mayorías nacionales. O como el caso de Venezuela, estimular (esa élite que desgobierna) confrontaciones con el “imperio norteamericano” (me anoto en esa tesis), para esconder el excremento del caos social, económico, político y ético (producto de pésimas políticas públicas y desviaciones inexcusables) que mantiene en situación de pobreza, ruina y sufrimiento humano a millones y millones de ciudadanos venezolanos. Es una estratagema perversa, cruel y a todas luces antihumana, porque pone en riesgo la vida de incontables nacionales, especialmente de los jóvenes, que serían reclutados para dizque defender los “sagrados intereses de la Patria”.

La experiencia de la “Guerra de las Malvinas” en la Argentina del predominio del “gorilato Militar” (1982), cuando (para tratar de escapar de la tragedia socio-económica en que habían sumido al pueblo argentino), de manera sorpresiva toman militarmente las islas Malvinas (en manos de Gran Bretaña), aun a sabiendas que ello desataría una situación de “guerra” con esa potencia. La derrota militar de esta dictadura “gorila” fue aplastante, con pérdidas importantes de la vida centenares de jóvenes inexpertos y, de miles y miles de prisioneros de guerra de nacionalidad Argentina.

Fue el principio del fin de la nefasta “dictadura militar y se reforzó (a partir de esa fecha) el dominio británico sobre las Malvinas Argentinas. ¿Se quiere repetir la historia de este caso, de este otro “gorilato” (militar-cívico), pero venezolano estimulando una confrontación con el “imperio norteamericano”, a sabiendas de una derrota militar casi segura? ¿O es una fórmula calculada para una posible capitulación, dado la gravedad de la crisis y caos nacional (generada por ellos mismos) a lo interno de Venezuela? ¡Sea lo que sea es inadmisible conducir a esta Venezuela de las banderas subyacentes de la paz, la generosidad y la solidaridad hacia un despeñadero bélico irresponsable!

Los altos enchufados de este régimen totalitario “cubanoide” han sido persistentes en la prédica y en las acciones de mantener una confrontación con los EEUU. Y hace varias semanas el “imperio” ha enviado claras señales de calarse más la buscadera de pleito contra éste. Las sanciones de funcionarios venezolanos incursos en conductas que atentan contra los derechos humanos y de corruptelas, ha sido la antesala de una respuesta contundente de este mismo “imperio” ante lo que ha denominado la “defensa de su seguridad nacional y de los derechos de los venezolanos”. Ojala que la sangre no llegue al río y los venezolanos y los norteamericanos podamos alcanzar juntos puntos de encuentro a favor de los intereses comunes y supremos entre nuestros pueblos. ¿No es eso lo que están logrando los cubanos en la actualidad, con el restablecimiento de las relaciones diplomáticas con el “imperio” (después de décadas perdidas) en pro de un modelo de desarrollo compartido?


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