¡CLIMA SOCIOPOLÍTICO CON MUCHA TENSIÓN!

En estos 16 años de desgobierno “comunistoide” los venezolanos hemos vivido permanentes climas de intranquilidad sociopolítico, pero el presente lleva el sello particular de mucha tensión, con el agravante de la ausencia del huésped de Miraflores, por encontrarse en una especie de tours presidencial por varios países del mundo (incluyendo a varios miembros de su familia); la furia de la represión policial desatada contra la gente que protesta en las calles ante la grave escasez y desidia gubernamental; las amenazas de altos enchufados oficiales de represión y cárcel contra opositores; los pronunciamientos públicos de los máximos dirigentes de la disidencia democrática de movilizaciones de calle, para exigir cambios en la conducción de la República y; por supuesto, la desesperadas colas de la escasez de millones de personas de todos los estratos sociales, para tratar de acceder a los alimentos básicos, insumos, bienes y servicios de toda laya. Nunca antes se había vivido un clima social semejante, con sabor a las amenazas de “tsunamis sociales” en cada rincón del país, especialmente en las grandes ciudades de esta Venezuela tormentosa.

Así mismo, para completar este cuadro de gravísima incertidumbre y tensión en el ámbito nacional, casi todos los analistas en esta materia, han coincidido en que, los resultados de la gira del heredero del “Palacio rojo”, han sido un total fracaso, porque no logró los objetivos de “dinero fresco” para paliar la situación del grave “hueco financiero fiscal” y, de consensuar a los miembros de la OPEP en relación a equilibrar de la producción y precios petroleros, según los intereses del desgobierno de Venezuela. Amén de que, el país no cuenta con otras alternativas para generar recursos financieros a corto plazo. Su dependencia de la riqueza petrolera es absoluta y, el país no se produce ni siquiera agujas para coser la vestimenta de los nacionales. Se vive de las importaciones de varios países de los productos básicos, insumos, equipos, tecnología, bienes y servicios. Los dólares para las importaciones escasean a grado extremo, porque PDVSA, se encuentra en bancarrota. Y son muchos los casos de defalco a la nación por miles de millones de dólares, sin que aparezcan culpables (que todo el mundo sabe pertenecen a las castas de poder cívico-militar). La amenaza de un default para Venezuela (lo dicen organismos y especialistas internacionales), está por concretarse a la vuelta de la esquina. Los “imperios rusos y chinos, no han querido comprometerse –hasta ahora- con más préstamos al país, porque la acumulación de éstos y, porque la deuda por barriles de petróleo a futuro, ya alcanzó el clímax.

Para muchos analistas de la situación del país y por los contenidos de los corrillos de calle, el “proceso de transición es inevitable”. Las movilizaciones de calles y negociaciones secretas, al parecer, marcarán la pauta. Hasta la Iglesia, como nunca antes en la historia, ha sido muy categórica en la exigencia de cambio radical en la conducción y modelo sociopolítico e ideológico imperante de la nación. En esa exigencia, millones de venezolanos, estamos anotados.

Y concluimos, una vez más, abrazados de la bella y sabia poesía de Neruda: “ Y todo vive para que yo viva:/ sin ir tan lejos puedo verlo todo:/veo en tu vida todo lo viviente…(…)porque en el trama de estos tejidos invisibles/del agua desbocada, de la incesante arena,/sostenemos la única y acosada ternura/”