¡MUERA LA LIBERTAD!... ¡VIVA LA LIBERTAD!

En Francia el “terrorismo” promovido por sectores fundamentalistas islámicos de AlQaeda acabó con la vida –de una manera brutal- de varios caricaturistas y periodistas del semanario humorista “Charlie Hebdo”, lo cual estremeció increíblemente a ese país occidental, considerado como la cuna de la libertad y de los valores democráticos en el mundo, desde hace varias generaciones. El grito de muera la LIBERTAD pareció ser la consigna que incitó a estos criminales para actuar con alevosía demoníaca y, tratar de apagar la creatividad e inmortalidad del humor, que se impregnó de irreverencia para cuestionar los símbolos “sagrados” de estos fundamentalistas ideopolíticos .

El mundo entero reaccionó indignado para expresar su condena y rechazó a estos actos propios de la barbarie del “terrorismo”. Y hace poco logró reunir a una gran mayoría de líderes de Francia y del mundo, quienes junto al pueblo de esa nación, marcharon por millones por la calles de París para gritar, a todo pulmón, ¡VIVA LA LIBERTAD!, ¡VIVA LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN!, ¡VIVA EL HUMOR INMORTAL!

Y en el otro extremo del planeta, en Venezuela, en la cuna de la libertad de casi toda la América Latina, liderada por el Libertador Simón Bolívar; desde hace 16 años se vive el infierno de una tiranía, impregnada del sello fundamentalista ideopolítico “comunistoide”; copiado del modelo castrista-cubano, para destruir todo vestigio de libertad y de los derechos ciudadanos. De esta manera, en los años de gestión gubernamental del fallecido caudillo “intergaláctico” de Sabaneta y, ahora con el desgobierno de su heredero de Miraflores, Maduro, los ataques del “terrorismo de Estado” contra los humoristas, periodistas y diversos medios de expresión libre; no han cesado jamás. Así, como los Castros dictatoriales, aplican con rigor de fascistas los métodos y procedimientos más crueles, para acallar las voces disidentes (asesinatos, torturas, cárcel, represión, hostigamiento y elaboración de expedientes amañados). En síntesis: por igual en Venezuela, como la Francia golpeada por el “terrorismo”, gritamos ¡VIVA LA LIBERTAD!, ¡VIVA LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN!, ¡VIVA EL HUMOR INMORTAL!

De esta manera, la lucha contra el “terrorismo” de claro sello de fundamentalismo ideopolítico, adquiere un carácter universal…es una misma lucha, independientemente de los matices diferenciales que podamos observar en Francia, Cuba o Venezuela. El “terrorismo” no tiene fronteras. Ni tampoco los modelos fundamentalistas que se quieren imponer. Su propósito es sembrar divisiones, odios y terror entre los seres humanos. Por eso no podemos dejar de gritar loas al amor, como la poesía del inmortal Neruda: “No tengo nunca más, no tengo siempre. En la arena/la victoria dejó sus pies desnudos./ Soy un pobre hombre dispuesto a amar a sus semejantes,/No sé quién eres. Te amo. No doy, no vendo espinas”